Esta es la verdadera razón por la que quieres un iPhone X
¿Es especial el nuevo modelo de Apple?
¿Cuáles son tus razones para el iPhone X? Retrocedamos hace 10 años y hagamos memoria primero. Cuando el iPhone original salió a la venta el 29 de junio de 2007, yo andaba con un Sony Ericsson W800, que lanzado 2 años, antes era de por sí un gran aparato,a pesar de su pequeño tamaño. Tenía una pantallita resultona, tarjeta de memoria para almacenar contenido multimedia y traía auriculares, ya que su gran valor era que funcionaba perfectamente como walk-man. Sony Ericsson era capaz de comerse el mundo y yo con ellos.
Pasó algo de tiempo y me hice con un iPhone original, ese tan preciado que no se vendió en España y que, obviamente, conseguí por una elevada cantidad de dinero, a pesar de ser de segunda mano y tenerlo sin caja ni nada más, aparte del cargador. Comprobé que estaba ante algo diferente, que aquello tenía un tufillo muy interesante y que quizás daría que hablar en un futuro.
Poco a poco, el iPhone fue popularizándose en nuestro país hasta que quizás la gran explosión llegó con el iPhone 3GS, si bien el iPhone 3G ya fue un objeto codiciado. Recuerdo que sacar del bolsillo un iPhone en aquellos años era toda una declaración de intenciones.
El iPhone original fue un gran dispositivo en sí mismo por todo lo que supuso. Un todo en uno, un diseño impecable, muy funcional y que todavía hoy sigue dando guerra en alguna que otra ocasión, como cuando salgo al campo y solo necesito eso, un teléfono para llamar y la brújula.
Lo que me lleva al iPhone X.
Desde 2007, el atractivo factor de comprar un iPhone ha disminuido. Con el paso de los años, a medida que las ventas de Apple se dispararon y el iPhone se convirtió en el teléfono inteligente más vendido en el mundo, el dispositivo se ha vuelto cada vez menos exclusivo. Cuando compras un iPhone, ya no eres especial; eres básico.
El iPhone X promete mucho. Tiene una pantalla de súper alta resolución que se extiende hasta casi el borde del dispositivo. Contiene el A11, el procesador móvil más avanzado y poderoso de Apple, aumentado con un "motor neuronal" de 6 núcleos que hace verdaderas virguerías a nivel de procesamiento.
Tiene una de las cámaras más avanzadas que se haya puesto en un teléfono inteligente, lo que le permite desbloquear el dispositivo con la cara, simular iluminación de un estudio profesional y renderizar tu cabeza como un emoji parlante.
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Todo esto suena genial, pero la verdadera promesa del iPhone X es que recupera el factor positivo. No solo es el prestigio de ser dueño de la última parte de Apple, pero el diseño del teléfono es propicio para hacerse notar. Si el iPhone original era una declaración de principios, sacar un iPhone X (sin funda, eso sí), es toda una declaración de guerra.
No muchas marcas pueden lograrlo. Requiere una combinación de diseño de productos innovadores, publicidad muy inteligente y buena voluntad general de marca. Google, Samsung, Amazon e incluso Microsoft solo pueden hacer dos de esas cosas correctamente. Solo Tesla está cerca de igualar a Apple en su capacidad de hacer que poseer un producto tecnológico sea una declaración de estado.
Con el iPhone X, esa declaración es más fuerte de lo que ha sido en 10 años. La limitada oferta y el alto precio (curiosa coincidencia con 2007), ambos inconvenientes para la mayoría de los productos, en realidad fortalecen el atractivo del teléfono. ¿Quién quiere unirse a un club que deja entrar a cualquiera? Lo prohibido siempre es lo deseado, desde tiempos de Adán y Eva. Curioso que la protagonista fuese también una manzana.
Para muchos, eso es lo que más les molesta de Apple: el campo de distorsión de la realidad que atrae la atención del consumidor. Lo hace hasta el punto en que un producto se convierte en algo imprescindible incluso antes de que alguien lo posea. Apple sin embargo, todavía convence a millones de ávidos usuarios de entregar sus números de tarjetas de crédito con entusiasmo.
Pero si estás en el club, todo lo que oyes son las quejas habituales de las personas que no pudieron entrar. Apple ha vuelto sexy al iPhone, y todos estamos invitados a la fiesta. El costo de entrada: solo un iPhone X.
¿Tienes razones para comprarlo? ¿Cuáles son? Estaremos encantados de leerlas en comentarios.
Vía | mashable