Así es como Apple construyó el iPhone X

Cómo se fue forjando el iPhone X, contado por sus protagonistas.

Así es como Apple construyó el iPhone X

Apple ha lanzado tres teléfonos este otoño y, como un padre que insiste en que ama a todos sus hijos por igual, afirma que el iPhone 8, el iPhone 8 Plus y el iPhone X son únicos y especiales a su manera. Pero es obvio que la compañía no está diciendo toda la verdad, porque el iPhone X es especial por derecho propio.

"Es algo completamente nuevo", dijo el SVP de Apple de marketing mundial, Phil Schiller. "Creo que los clientes estaban listos para tener una cosa más en la línea de iPhone que era nueva y muy diferente".

Sobre cómo se forjó el iPhone X, Schiller, Craig Federighi, Dan Riccio y Alan Dye se sentaron a hablar sobre esto, en unas conversaciones recogidas por el medio mashable.com.

"Es uno de esos proyectos en Apple en los que te preparas para hacer algo que, al principio, piensas, no hay forma de que podamos llevarlo a cabo".

Así es como Apple construyó el iPhone X

Al igual que prácticamente todos los demás productos de Apple, el iPhone X nació de un proceso colaborativo e interdepartamental. Se basó en equipos y disciplinas que la compañía ha estado probando durante años. Algunos, como el mapeo de profundidad 3D y la tecnología OLED nunca se han utilizado en un producto Apple. Los ejecutivos de Apple también revelaron por primera vez lo difícil que era para ellos quitar el botón de inicio, y por qué no creen que la muesca, donde reside el módulo de procesamiento de imágenes TrueDepth del iPhone X, es un gran negocio.

"Todos sabíamos hacia dónde íbamos", dijo, "pero había una docena de cosas que sabíamos que teníamos que resolver, y ninguna de ellas podría haber fracasado".

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La concepción

Dependiendo de a quién le pregunte, el trabajo en el iPhone X comenzó hace casi tres años o hace mucho, en el año 2007.

Fue alrededor de 2014, año en el que el equipo de silicio de Apple decidió incluir un motor neuronal dentro de lo que eventualmente se convertiría en la CPU Biónica A11. "En ese momento, no sabíamos exactamente para qué lo usaríamos, pero como el silicio lleva mucho tiempo en el horno, sabíamos que teníamos que incluirlo en aquel momento", dijo Riccio.

Ese silicio permitió cosas en el dispositivo como la realidad aumentada y potentes funciones de Face ID. Sin embargo, la base para un iPhone de pantalla completa se colocó hace una década. "Ha sido un sueño que hemos tenido desde el iPhone original", dijo Schiller. "Hemos tenido un sueño desde el primer día para que sea todo pantalla, de punta a punta".

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Quizás no es ningún secreto que Apple quería eliminar los botones e incluso la "cabeza" y el "mentón", en su mayoría espacio muerto en el iPhone, pero los ejecutivos de Apple ofrecieron una visión fascinante de por qué esto está sucediendo ahora y cómo Apple identificó el momento en que todas las tecnologías necesarias que se filtraron durante años estaban listas para hacer posible un iPhone con pantalla completa.

Y Apple iba a entregarlo el próximo año.

"En cuanto a los cambios de diseño de último minuto, en realidad, no tuvimos tiempo para eso".Como lo describió Riccio, Apple tenía "la línea de visión" para un lanzamiento del iPhone X en 2018, "pero con mucho trabajo, talento, y determinación pudimos entregarlos este año".

Esa elección, que en retrospectiva parece un tanto extraña considerando cómo la propia existencia de un iPhone mejor puede haber afectado la fortuna del iPhone 8, aparentemente ejerció presión adicional sobre los equipos.

En un momento raro, aunque breve, de impresionante transparencia, Riccio reveló que la línea de tiempo comprimida dejaba poco espacio para considerar alternativas funcionales. Tales cambios son parte del saber del iPhone de Apple. Steve Jobs demandó que el equipo cambie la pantalla de plástico rayaable del iPhone original unas pocas semanas antes de su lanzamiento.

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Cuando Apple tomó la decisión de eliminar el botón de inicio y el escaneo de huellas dactilares de Touch ID a favor del Face ID, Riccio dijo que todos se involucraron con esa decisión funcional.

"No pasamos mucho tiempo mirando (poniendo) huellas dactilares en la parte posterior, a través del cristal o en el costado", dijo. Apple lo hizo porque creían en la calidad de la seguridad de Face ID y en el desbloqueo de pantalla, con ejecutivos que la describían tan bien como un Touch ID de segunda generación, pero también porque simplemente no había tiempo.

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"Francamente, este programa fue en una vía tan rápida para ser ofrecido y habilitado este año. Tuvimos que bloquear el diseño muy, muy temprano. De hecho, bloqueamos el diseño en noviembre", dijo Riccio antes de que fuera interrumpido por el Apple PR. Riccio pareció darse cuenta de que había dicho tal vez demasiado, y luego reafirmó con una sonrisa: "Tuvimos que cerrarla temprano".

No es del todo sorprendente que Apple no haya tenido grandes alteraciones de última hora. Después de todo, estaban haciendo algunos de los cambios de diseño y funcionalidad más agresivos en la historia del iPhone.

Irse a casa

Pocas cosas molestan a los fanáticos de los productos de Apple como una eliminación. Apple ha sido ridiculizada en los últimos años por quitar los conectores de auriculares en iPhone y prácticamente todos los puertos de terceros en MacBooks y MacBook Pro. ¿Apple tenía alguna inquietud sobre cuál podría ser su eliminación más agresiva de todas?

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El orgullo continuo de Apple en el botón de inicio fue claro, ya que Schiller describió lo duro que trabajaron y cómo, con cada generación de iPhone, ha cambiado, volviéndose más poderosos y, cuando agregaron Touch ID, fueron fundamentales para la operación del iPhone y la seguridad.

Es difícil exagerar la importancia del botón de inicio, ya que sigue siendo la primera forma en que todos interactúan con su iPhone. (Levanta tu teléfono, ¿a dónde va tu pulgar?)

Schiller sonó, por un momento, como si estuviera haciendo un caso para mantener el botón de inicio.

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"Así que aquí estamos en el pináculo de la mejor interfaz de un solo botón en un dispositivo; realmente, no creo que sea una exageración, y con una ventaja estratégica increíble en comparación con cualquier otra persona, nadie tiene un sensor táctil que funcione tan bien como Touch ID y justo cuando estamos en el pináculo, lo reemplazamos", dijo Schiller. Luego se rió y agregó: "Eso es así, como otras cosas que hemos hecho".

Reemplazar una característica que le gusta a la gente, y que Apple cree que es una de sus mayores innovaciones tecnológicas, es arriesgada y solo intensifica la presión sobre cada tecnología de reemplazo en el iPhone X.

"No lo reemplazamos porque no funcionó bien", dijo Schiller. "Lo reemplazamos porque queríamos hacer otra cosa y, por lo tanto, el listón era muy alto y tenía que ser genial".

"Así que aquí estamos en el pináculo de la mejor interfaz de un solo botón en un dispositivo ... y justo cuando estamos en el pináculo, lo reemplazamos".

Cada una de esas tecnologías de reemplazo presentó sus propios desafíos: "Creo que el desafío más difícil que tuvimos fue reemplazar Touch ID. Muy, muy duro", dijo Riccio.

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Apple sostiene que Face ID, su nueva seguridad biométrica, es una estrategia de autenticación mejor y más natural. Nadie, Riccio nos recordó, examina la huella dactilar de alguien cuando intenta identificarlos en la calle.

"Usas tus ojos y los reconoces de esa manera", dice. Riccio hace un punto obvio. Menos evidente fue cómo Apple implementaría el reconocimiento facial en el iPhone.

Afortunadamente para Apple, ya tenía la tecnología central en casa, incluso si nunca previó su uso para este propósito.

En 2013, Apple adquirió PrimeSense, la compañía más conocida por la construcción de la primera tecnología de seguimiento de movimiento 3D en el Kinect original de Microsoft. "No sabíamos qué lugar tendría", dijo Riccio. Pero Apple decidió invertir y desarrollarlo de todos modos, pensando que "algún día podríamos tener un lugar", recordó Riccio.

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Incluso cuando Apple abordó la idea de integrar la tecnología de detección de profundidad 3D en el iPhone, nunca consideraron usarla para la autenticación. En cambio, Apple se centró en habilitar experiencias livianas como los nuevos animojis, que utilizan un mapa de profundidad 3D de su cara para sincronizar sus expresiones con un personaje de dibujos animados de iMessage en la pantalla.

Al mismo tiempo, el equipo de Riccio decidió ver qué pasaría si se casaran con las capacidades de detección de profundidad con una cámara IR para reconocimiento facial. Los resultados fueron mejores de lo que esperaban.

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"No estábamos tan lejos de las especificaciones que teníamos en Touch ID, tanto en lo que llamamos tasa de aceptación falsa, que es otra persona que intenta usar su teléfono, y la tasa de rechazo falso, que es más molesto, donde eres tú, pero dice que no eres tú", dijo Riccio.

Con el hardware True Depth en su lugar, el equipo se centró en el motor neural A11 Biónico y otros software y algoritmos para reducir la tasa de aceptación falsa de uno en 50000 a uno en un millón.

La muesca

La solución de Apple para una pantalla de inicio sin botones, sin embargo, tuvo una gran consecuencia. El módulo TrueDepth reside en la parte frontal del iPhone X, cavando una muesca de casi un cuarto de pulgada de profundidad en la pantalla OLED perfecta de Apple. Al elegir una ubicación similar para la tecnología de autenticación de escaneo IRIS en el Galaxy S8, Samsung, en particular, eligió simplemente darle el borde superior completo del dispositivo y no cortar en su pantalla.

Schiller, sin embargo, hizo una defensa enérgica e inusual de la muesca del iPhone X.

"Para mí, es algo que, a medida que lo usas, te hace sentir cómodo rápidamente. Lo ves como algo de la pantalla. No lo ves como algo inusual o diferente, más allá de que la mordedura del logo de Apple se ve mal al ser arrancada de la manzana. Es un bocado de la manzana y así es como es. Es solo la pantalla", dijo Schiller.

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También está orgulloso de la gran cantidad de tecnología que se apretó en el espacio de la muesca. Hay ocho componentes en el espacio, que incluyen la cámara de infrarrojos, el iluminador de inundación, el sensor de luz ambiental, un altavoz, un micrófono, una cámara frontal y un proyector de puntos. "Es una de las secciones de tecnología más densas que hemos creado", dijo.

Mírame

Y esa muesca estará más ocupada que el botón de inicio del iPhone. Apple también está utilizando la cámara TrueDepth y sus capacidades de seguimiento facial para rastrear la atención.

Federighi dijo que Apple está aprovechando la detección de atención y la administración de la frecuencia con la que el iPhone X te devuelve la mirada.

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"Es una de las secciones de tecnología más densas que hemos creado". Además de identificar tu rostro entre millones de otros para desbloqueo seguro, el iPhone X realiza un análisis de detección de atención menos personalizado. "Solo una, ¿alguien está mirando el teléfono ahora?", dijo Federighi.

Si bien puede parecer espeluznante, en realidad es un movimiento de eficiencia de la batería. Los iPhone actuales mantienen su pantalla encendida durante un tiempo después de que los dejas en la posibilidad de que todavía los mires. Si está leyendo en el iPhone, es posible que tengas que tocarlo de vez en cuando para evitar que se atenúe o se apague.

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"Ahora podemos usar tus ojos como ese toque virtual", dijo Federighi. "Si estás leyendo algo, el teléfono puede comprobar periódicamente, que la mirada sigue apuntando a la pantalla, así que no se atenúa el teléfono, pero si nadie está mirando el teléfono, el teléfono puede ser más agresivo para atenuarse y ahorrar energía".

Federighi dijo que el iPhone X busca este tipo de atención aproximadamente cada 30 segundos.

Despertarse

Obviamente, el iPhone X no está tan alerta que nunca se va a dormir. Colócalo en el escritorio y, según tus ajustes, se bloqueará automáticamente y la pantalla se apagará. Lo que lleva a otro núcleo y cambio radical.

Despertar el iPhone X es otro recordatorio de lo que falta. Sin un botón de inicio, ¿cómo se abre el teléfono?

"Es el mayor ajuste en la experiencia, pero creo que se produce con bastante rapidez", dijo Federighi, que pasó tanto tiempo con el iPhone X que, cuando toma el teléfono de su esposa, comienza a deslizarlo hacia arriba y luego puede hacerlo. Te da a entender por qué no está pasando nada.

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Aunque Apple se había comprometido a eliminar el hardware del botón de inicio, consideraba otras formas de representar la misma idea.

Enseñar a los usuarios de iPhone nuevos hábitos significaba que, hicieran lo que hicieran, tenía que ser obvio y claro.

"No hay duda, exploramos si es la forma de la flexibilidad visual o si es totalmente nueva o, tal vez... las versiones digitales del botón de inicio. Por supuesto, fuimos muy, muy amplios, como lo hacemos, más o menos, con todo", dijo Dye, quien afirmó que los equipos trabajaron estrechamente con el diseñador jefe de Apple, Jony Ive, así como con todos los equipos de hardware y software.

El resultado es una barra bastante indescriptible que aparece en la parte inferior de la pantalla y, si no la usas de inmediato, te recuerda "deslizar hacia arriba para abrir". Dye dijo que la apariencia desmiente todo el trabajo que cuando en él y la increíble atención que se presta a la colocación, el tamaño y el acolchado a su alrededor.

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Federighi añadió que versiones más pequeñas de lo que él llamó una "barra de captura" aparecieron antes en el iPhone, más notable en el centro de control de iOS 7. Casualmente, la barra de gestos del iPhone X forzó el movimiento si el Centro de control se desliza hacia arriba desde la base hacia un deslizamiento menos intuitivo desde el lado derecho de la muesca.

A diferencia del botón de inicio, este gesto de barra sirve para un propósito: deslizar hacia arriba para abrir el iPhone X. Sin embargo, incluso después de que la gente aprenda el nuevo gesto, no puedes apagar la barra, confirmó Federighi.

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Los usuarios de iPhone X solo se acostumbrarán a ese nuevo gesto si funciona de manera precisa e instantánea cada vez.

"Trabajamos para obtener cada milisegundo de latencia de este gesto. Si en el momento en que tu dedo toca la parte inferior de la pantalla, si la IU no responde, no estaríamos contentos con ello", dijo Federighi, quien recordó el desarrollo temprano y recorrió con "prototipos improvisados, locos TrueDepth atornillados, incluso la nueva interfaz ejecutándose en iPads".

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La primera pantalla OLED de iPhone de Apple y sus tasas de actualización mejoradas ayudaron a algunos con este esfuerzo. Aún así, incluso agregar OLED viene con su propio conjunto de desafíos.

Más que una cara bonita

Apple había estado trabajando en el OLED durante años, pero sabía que no podían usar la tecnología OLED para iPhone X. "Para habilitar el diseño de borde a borde que queríamos, no podía ser un típico OLED, tenía que ser un OLED flexible para poder ir de arriba a abajo y de lado a lado", dijo Riccio.

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También tuvieron que superar algunos de los desafíos de la tecnología OLED existente, incluida la precisión del color, la vista fuera del eje y la grabación .

"Somos muy particulares sobre los colores de todo el sistema". Apple confirmó que el iPhone X usa una pantalla OLED Samsung, pero no es un componente estándar. Trabajaron con Samsung para crear tecnología a medida y luego, nos dijo Federighi, hicieron un montón de trabajos de software de bajo nivel para superar los inconvenientes inherentes de OLED.

Incluso la tecnología OLED perfecta manejará la representación del color de forma diferente a la LCD.

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"Asegurarnos de que los colores fueran consistentes con nuestras expectativas fue un desafío", dijo Dye, cuyo equipo pasó tiempo ajustando las pantallas y trabajando sobre cómo el OLED mostraría los colores del sistema. "Somos muy particulares sobre los colores de todo el sistema".

Aplicaciones a gusto

Para todos los cambios que promete el iPhone X, hay muchas cosas que afortunadamente no han cambiado o que al menos funcionarán a pesar de los cambios. Las aplicaciones de terceros que utilizan Touch ID para autenticarse funcionarán automáticamente con Face ID, dijo Federighi.

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Ni siquiera hay una versión personalizada de iOS 11 para el iPhone X. En cambio, Apple diseñó la mecánica subyacente de cómo funciona la interfaz de usuario y el motor detrás de ella para admitir tanto el iPhone X como la experiencia tradicional del iPhone.

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Cuando se le preguntó a Federighi cómo los desarrolladores de aplicaciones estaban lidiando con la nueva pantalla borde a borde, notó que la mayoría están preparadas.

"En general, la mayoría de los desarrolladores ahora han aprovechado las clases de tamaño y diseños automáticos y otras tecnologías para adaptarse a una amplia variedad de tamaños de pantalla ... Hay muy poca dependencia donde los desarrolladores esencialmente han codificado sus relaciones de pantalla", dijo.

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Aún así, este diseño de iPhone X reconocible aunque diferente podría confundir o frustrar a algunos. Schiller reconoció el desafío mientras giraba hacia otra victoria de Apple. "Sí, hay un momento en que necesitas aprender. Es una experiencia completamente nueva. De hecho, me encanta eso. Para mí, la tecnología es emocionante cuando no te quedas atrapado en tus caminos durante una década, sino que aprendes algo nuevo".

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Le has estado pidiendo a Apple que innove durante años. Ahora, debes preguntarte, ¿estás listo para aceptar lo que realmente significa la innovación?

Vía | mashable

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